A Través de la cerámica artística, establecemos una vía de comunicación
directa y alternativa con nuestra propia personalidad que nos ayudará a
realizar un ejercicio de introspección y autoconocimiento. Las emociones
y nuestros sentimientos, saldrán a la superficie de manera más fluida,
mejorando nuestro propio autoconocimiento y nuestra propia autoestima.
Para el que sabe observar, la expresión artística a través de la
cerámica, se revelan como una herramienta eficaz para reducir los niveles de
ansiedad, estrés y depresión, en un primer nivel, que en algunos casos,
pueden acabar explosionando en comportamientos agresivos hacia los demás y
hacia uno mismo.
¿Por qué la cerámica?, la cerámica es dócil al tacto, amable en cuanto a
los resultados iniciales, nos recuerda nuestros primeros juegos en la
arena, con el agua, el barro en definitiva, es una experiencia muy
personal y natural, no hacen falta herramientas, que sin embargo, nos permite
con el tiempo la utilización de técnicas de gran complejidad en la medida que
evolucionamos en su uso.
A través de cualquier actividad artística, bien sea pintura, cerámica,
collage, etc.…, se establece comunicación con nuestro más íntimo ser
interior, principalmente cuando las técnicas más convencionales no son
suficientes para que sea posible ningún tipo de comunicación. Una obra de arte
expresa aquello que la persona quiere volcar, pero no sabe cómo hacerlo,
muestra su yo más interno y permite que salgan a la luz multitud de
pensamientos y sentimientos, todo ello a partir de la propia creación.
Por otra parte, los trabajos realizados, sirven como toda una declaración
de intenciones, que revelan a modo de espejo para el que sabe observar, donde
están aquellos principales obstáculos o nudos que impiden que nuestros sentimientos fluyan
de manera natural.
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